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Con la llegada del verano apetece mucho más vestirse con ropa blanca. De hecho es un color predominante en nuestro armario entre la ropa de verano.

Pero su mayor uso también hace que el número de manchas, en estas prendas más delicadas, se multiplique y que, por el exceso de lavados, vaya perdiendo su color blanco original.

¿Y tu, qué usas para quitar las manchas en la ropa blanca? Seguramente lo primero que se te viene a la cabeza es lejía, talco, agua, alcohol, agua oxigenada o algún consejo casero de tu abuela. El caso es que de una manera u de otra vas a usar un quitamanchas.

Además de las manchas, no es raro que la ropa blanca se vuelva amarilla o gris conforme pasa el tiempo. Así, que si lo que necesitas es quitar bien las manchas y recuperar la blancura de tu ropa, sigue estos sencillos consejos dependiendo del tipo de tejido:

Ropa blanca de algodón
Para blanquear la ropa de algodón de forma natural se debe añadir al detergente habitual el jugo de 2 limones y 1 puñado de sal. Deja reposar la ropa blanca en esta solución durante media hora. Luego, lava la ropa como de costumbre con tu detergente habitual. Se reforzará el efecto de estos blanqueadores naturales si se deja secar la ropa al sol.

La ropa antigua o las mantelerías y sábanas antiguas que no se usan regularmente van adquiriendo con los años un tono amarillento. Para devolver su blancura original, no se debe usar nunca lejía, ya que sólo haría que se tornen más amarillas y, además, dañaría el tejido. Se debe dejar remojando en un barreño con leche cruda. Si la ropa presenta manchas de humedad, se eliminarán añadiendo 1 chorrito de amoniaco al agua de lavado.

Ropa blanca de lana o tejidos delicados
Para evitar que las prendas de lana blanca se vuelvan amarillas, se deben: lavar con agua fría y detergente para ropa delicada y luego añadir al agua de enjuagar 3 cucharadas soperas de agua oxigenada.

Ropa blanca de encaje
La ropa blanca de encaje es la más delicada para lavar, si está percudida o desteñida y quieres blanquear estos tejidos, lava con las manos. Después de lavarla, sumérgela en agua a la que habrás añadido agua oxigenada (un vaso por cada litro de agua), y unas gotas de amoniaco. Déjala un rato en remojo y a continuación aclara abundantemente.

Estos son algunos consejos caseros, económicos y naturales. Pero si no tienes mucho tiempo y prefieres usar detergentes o quitamanchas especializados que ofrezcan óptimos resultados debes tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

-Escoge un quitamanchas de ropa, especial para tu ropa blanca.
-Compra uno de buena calidad y precio.
-Fíjate en su composición química, para evitar que tu ropa pierda blancura.
-Escoge quitamanchas para ropa sintética y para tejidos de algodón o de lana distintamente.
-Escoge quitamanchas para ropa de bebé, diferente a la de ropa para adultos.
-Cuando compres un quitamanchas debes buscar uno que te dé la seguridad de conservar el color de la tela blanca.
-Fíjate bien en las indicaciones. Hay quitamanchas poco efectivos, o ineficaces para determinadas manchas.