El agua desionizada es aquella que carece de casi todas las partículas innecesarias: sustancias orgánicas, microorganismos y iones (tanto negativos: carbonato, cloruro, fluoruro… como positivos: sodio, calcio, hierro, cobre…). Es inodora, incolora e insípida y, al carecer de todo tipo de partículas y minerales, no es óptima para el consumo humano.

Para conseguir este tipo de pureza es necesario que el agua pase por metódicos procesos industriales complejos de ósmosis inversa, que hace que carezca apenas de carga eléctrica, por lo que es muy útil para la industria en general. Es importante remarcar que para que sea considerada desionizada debe tener una conductividad menor a 5 uS/cm.

Ojo! No confundir el agua destilada con el agua desionizada. La primera se consigue hirviendo el agua para eliminar una parte de sus componentes, pero en ningún caso se ha sometido a procesos tan complejos y exigentes para que resulte desionizada. Es apta para usos industriales pero también para usos domésticos. Vamos a echarles un vistazo…

USOS EN LA INDUSTRIA:

– Salud: Se usa en laboratorios para procesar análisis y como herramienta higiénica.
– Cosmética: Ideal para fabricar productos y para la higiene de sus equipos.
– Destilerías: Su uso se emplea para rebajar los grados de alcohol de la bebida sin alterar el sabor.
– Electrónica: Se aplica para desengrasar, galvanizar, bruñir y limpiar los componentes sin dañar los materiales.
– Limpieza vehículos: Su uso se da en las fases de enjuague y encerado para eliminar los restos contaminantes de la carrocería.
– Industria alimentaria: Ideal para los procesos de ebullición, de enfriamiento para el transporte y el acondicionamiento de materias primas.
– Baterías: Para el mantenimiento de las baterías que funcionan con agua.

USOS DOMÉSTICOS:

– Planchar: El agua desionizada para planchar prolonga la vida útil de la plancha y la ropa.
– Higiene del hogar: Se recomienda usarla en los humidificadores para reducir el riesgo de proliferación de microorganismos.
– Peceras: Con ella se puede limpiar y equilibrar la calidad del agua evitando el uso de químicos.
– Limpiar cristales: Con su uso los cristales y espejos quedan perfectos y sin restos.
– Regar: Algunas plantas requieren del uso del agua desionizada para evitar que sus raíces mueran (como las carnívoras).