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No hay casa en la que falte el bicarbonato sódico, comúnmente conocido como bicarbonato. Esto se debe a la multitud de beneficios que se obtienen al disolverlo con agua. Se trata de un compuesto cristalino que tiene la capacidad de liberar dióxido de carbono cuando entra en contacto con los ácidos. Con el tiempo, las reacciones químicas de bicarbonato comenzaron a estudiarse con sustancias y compuestos producidos por nuestro cuerpo, y rápidamente se volvió una opción para ciertas dolencias o alternativa a medicamentos.
A continuación, te presentamos algunos de sus usos más frecuentes:

Usos frecuentes del bicarbonato

Antiácido
La acidez estomacal es una sensación de ardor y dolor que puede producirse al comer alimentos grasos, picantes o en grandes cantidades. Tomar bicarbonato de sodio cuando tenemos acidez y ardores es una opción natural excelente para neutralizar los ácidos presentes en el estómago y evitar o aliviar el reflujo. Para usarlo solo se debe agregar 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico en un vaso de agua.

Salud bucal
Es importante cuidar la higiene bucal para prevenir posibles infecciones. Por ello, el enjuague bucal se ha vuelo un elemento esencial. El bicarbonato sódico, gracias a sus propiedades antibacterianas, puede utilizarse como desinfectante y alternativa del enjuague bucal. Puede ayudar a aliviar las úlceras bucales y eliminar la placa de los dientes, controlando dichos ácidos y logrando que desaparezca.

Mejora el rendimiento físico
El bicarbonato es elegido por muchos deportistas gracias a que neutraliza la acidosis producida durante la actividad física, un compuesto producido por las células musculares durante los ejercicios aeróbicos o de alta intensidad que se caracteriza por causar dolores y fatiga. El consumo de bicarbonato sódico 1 o 2 horas antes del ejercicio aporta al cuerpo una mayor tolerancia a la acidez, lo que se traduce en un mejor rendimiento.

Fortalece la piel
El bicarbonato sódico puede usarse como exfoliante de la piel, elimina las células muertas del cutis y limpia en profundidad. También puede ayudar a curar quemaduras, a calmar las molestias de picaduras de insectos, mejorar los eczemas y facilitar la eliminación de los hongos de la piel.

Como ya se ha visto, el bicarbonato sódico puede ser una excelente solución a problemas puntuales. No obstante, su consumo en grandes cantidades puede incrementar los niveles de sodio o alterar el equilibrio ácido-base del cuerpo. Por este motivo no se debe consumir a diario o en dosis que superen la cucharadita. De lo contrario, puede causar náuseas, hinchazón, gases y dolores articulares.