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Si hay un problema común en todo el mundo apícola es el temido parasitismo que provoca la Varroa destructor, una amenaza real que llega todos los años afectando a millares de colmenas. Gracias a la acción del ácido oxálico los apicultores consiguen mantener a este parásito a raya. Pero vamos a ver qué es la Varroa, en qué consiste la acción del ácido oxálico y qué beneficios y aplicaciones tiene en la apicultura.

La Varroa es un género de ácaros que produce la enfermedad denominada varroosis. Este ácaro, que recuerda a una garrapata, se adhiere al cuerpo de las abejas causándoles heridas, atacando a las crías, chupándoles la hemolinfa, debilitando las colmenas y volviéndolas susceptibles al ataque de cualquier virus. Si no es tratado a tiempo termina por provocar la muerte de las colmenas en pocos años.

Origen de la varroa

Proviniente de Ásia, llego a España en la década de los 80 para quedarse. Lamentablemente, su presencia está garantizada en cualquier colmenar y su contagio se produce por varias causas derivadas del contacto directo entre abejas afectadas, colmenas, zánganos o por la transhumancia y los enjambres comerciales. Una vez dentro de la colmena, la varroa es capaz de detectar qué celdillas de cría están a punto de cerrarse, entrar en ellas y ocultarse bajo el pollo de abeja. Luego espera a que el sello se cierre para salir, picar para alimentarse y comenzar allí su ciclo de reproducción.

Teniendo en cuenta la gran importancia que tienen las abejas en nuestra cadena alimentaria y el resto de amenazas con las que tienen que lidiar (abejas asiáticas, destrucción de colmenas y otros parásitos), la varroa es un enemigo que hay que combatir y para el que ya existen poderosos acaricidas como el ácido oxálico. Lo importante es estar bien atento a las colmenas.

Ácido Oxálico para combatir la varroa

El ácido oxálico es el acaricida orgánico más utilizado para combatir la varroa. Se trata de un compuesto químico orgánico que se encuentra presente en la naturaleza en frutas, en algunas plantas y hasta la miel (en muy poca cantidad). Sus principales ventajas se basan en que:

– No deja residuos en la miel si se aplica en las dosis adecuadas.
– Es un principio activo orgánico, cuyos tratamientos són válidos para apicultura ecológica.
– Es muy efectivo cuando se trata sin la presencia de la cría.

El ácido oxálico, como los productos orgánicos en general, tiene la característica de tener cierta inestabilidad ante diversas condiciones climáticas a las que son expuestos. Este principio activo actúa sólo sobre los ácaros foréticos (ubicados sobre las abejas adultas) y no en aquellos ubicados en la cría. Por ello, es importante que la colmena cuente con la menor cantidad de cría posible para obtener las mejores eficacias durante el tratamiento. El mecanismo de acción del ácido oxálico frente al parasito sería por la sensibilidad de los mismos a los pH ácidos.

En el siguiente vídeo se muestra como se aplica el ácido oxálico en las colmenas con el uso de un vaporizador: