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En los últimos años muchas mentalidades han cambiado, a raíz de acciones que han marcado un antes y un después. Somos una sociedad que avanza hacia un futuro mejor y que evita quedarse anclada en limitaciones del pasado y estereotipos marcados por el machismo.

Este año ha sido un año de cambios, sobretodo en el sector de la química, ya que desde el mes de noviembre el presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas ha sido relevado de su cargo para que, por primera vez, una mujer tome las riendas de esta industria tan marcada por un alto índice de hombres. Hablamos de la nueva y primera presidenta del CSIC, Rosa Menéndez, una doctora y mujer muy influyente.

Por primera vez desde que se creó este consejo, hace 78 años, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, es presidido por la investigadora asturiana Rosa Menéndez. Se trata de la primera mujer que dirige uno de los siete organismos públicos de investigación de España, que hasta ahora siempre habían sido liderados por hombres.

La nueva presidenta, graduada en química por la Universidad de Oviedo, ha estado relacionada con la investigación de materiales y energía. Ha colaborado con industrias como la eléctrica, aeronáutica, carboquímica y petroquímica. También ha publicado más de 200 artículos en revistas, capítulos de libros y dirigido 18 tesis doctorales. Y tiene un total de nueve patentes.

En 2016 fue seleccionada  como una de las 100 mujeres más influyentes en España. Un ránking que se creó en 2011 con el objetivo de hacer visible el talento femenino en la sociedad.

La presidenta destaca la importancia de tener apoyo de sus seres queridos más cercanos, ya que sin ellos llegar a este gran cargo hubiese sido imposible, debido a que también es madre de dos hijos.  Lo que más destaca Rosa de una carrera científica es la posibilidad de que cada uno se marque su ritmo y sus metas.

Hoy en día el CSIC cuenta con 13.000 investigadores aproximadamente, de los cuales el 35,7% está representado por mujeres.